Los restos, que no tienen nada de extraterrestre, pertenecen a una tribu que deformaba los cráneos de sus hijos con vendajes
Desde Akraim, un lugar arqueológico situado al sur de los Urales, y conocido como el Stonhenge ruso, llegan noticias que alegrarán a los magufos. Como cada vez que se descubren restos humanos con cráneos deformes, los amantes de lo paranormal creen ver pruebas "innegables" del origen alienígena del sepultado.
Siento decepcionarles, pero lo lógico al observar cráneos alargados es pensar que la deformidad o bien se debe a alguna enfermedad (las menos de las veces) o bien es un efecto buscado y por tanto provocado por los padres de la criatura.
Los arqueólogos saben bien que en la antigüedad algunas civilizaciones, como la egipcia o la azteca, gustaban de provocar deformaciones craneales como forma de señal de estatus, para lo cual ataban cuerdas o trapos en las tiernas y "moldeables" cabezas de sus hijos. Los restos de esta tumba descubierta en Akraim (excavación datada en el 4.000 a.C.) no son una excepción, si bien son mucho más modernos y podrían tener menos de 2000 años.
Craneo alargado descubierto en Rusia, posiblemente perteneciente a una mujer de la tribu de los Sármatas fallecida … |
A pesar de que el esqueleto está siendo anunciado en webs "amantes del misterio" como la prueba de que los alienígenas vivieron entre nosotros hace miles de años, los arqueólogos responsables del hallazgo no comparten para nada esta ridícula conclusión. Como comentado, los científicos creen que perteneció a una mujer de una tribu que usaba vendajes para alargar y deformar el cráneo.
En declaraciones de la investigadora Maria Makurova para la agencia de noticias TASS: "Hemos encontrado un esqueleto buen preservado. Yo no excluiría la posibilidad de que perteneciese a una mujer de la tribu de los Sármatas. Este grupo étnico vivió en los territorios de lo que hoy en día es Ucrania, Kazajstán y el sur de Rusia".
Esqueleto encontrado en Akraim. Desde esta perspectiva no se aprecia la deformidad del cráneo. |
En cambio, a los amantes de lo paranormal la explicación dada por los científicos les parece el enésimo intento de la ciencia y los gobiernos por ocultar la verdad. Para ellos tiene mucho más sentido pensar que la tribu tenía la costumbre de alargar la cabeza de sus hijos para imitar los cráneos alargados de los extraterrestres que les visitaban.
Pese a que se tenía constancia del sitio (gracias a fotografías aéreas) ya en 1935, las excavaciones en el yacimiento arqueológico de Akraim, situado en la región de Chelyabinsk, no se iniciaron hasta 1987.
Y si comenzaron fue porque las autoridades rusas habían decidido inundar el lugar para crear un lago artificial en 1987, aunque antes de iniciar el proceso dieron a los arqueólogos un año de plazo para estudiar los extraños círculos que se apreciaban desde el aire, por si fueran de interés. Afortunadamente la inundación nunca se realizó, y el fascinante lugar sigue siendo estudiado en la actualidad.
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