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Descrifrado el misterio de "Manos terribles", un dinosaurio con aspecto de avestruz, tras 50 años

  • El hallazgo de dos nuevos esqueletos en Mongolia ayuda a categorizarlo
  • Hasta ahora se creía que podía ser un gran depredador por sus garras
  • Ahora se ha descubierto que se alimentaba de pequeños peces y plantas
Un equipo de investigadores coreanos y estadounidenses ha descifrado el misterio de hace 50 años del dinosaurio Deinocheirus mirificus, 'Manos terribles', del que hasta ahora solo se conocía un ejemplar que apenas convervaba las extremidades superiores, de 2,4 metros de largo, terminadas en un enorme conjunto de garras de 20 centímetros.

Estos rasgos hicieron pensar que podría tratarse de un gran depredador, pero el hallazgo de otros dos esqueletos más en Mongolia han permitido reconstruir el aspecto completo de este enorme dinosaurio con aspecto de avestruz, esencialmente herbívoro aunque también comía pequeños peces. El hallazgo ha sido publicado este jueves en la revista Nature.

Los dos nuevos fósiles de esqueletos parciales del misterioso dinosaurio han revelado que este terópodo gigante "casi tan grande como un Tyrannosaurus Rex" era en realidad un ornitomimosaurio, similar a las avestruces modernas, con una joroba en el lomo. Uno de los ejemplares descritos tenía 11 metros de largo y pesaba seis toneladas.

El Deinocheirus mirificus vivió hace 70 millones de años en lo que ahora es el desierto del Gobi, en Mongolia, entonces una zona de ciénagas. Se cree que se movía con pesadez y que sorbía pequeños animales y plantas con su gran lengua, según informa Europa Press. En uno de los nuevos fósiles se han hallado escamas y huesos de peces pequeños.

En el artículo, publicado en Nature, también se detalla que la "vela" huesuda en la parte posterior del lomo es similar a su primo lejano el Spinosaurus. Su pico, sin dientes, es parecido al de los patos y su principal característica son las "pezuñas" bajo sus garras, que le ayudaban a no hundirse en la tierra fangosa.
Descubierto por primera vez en 1965 en Mongolia

"Durante casi 50 años Deinocheirus ha sido uno de los dinosaurios más misteriosos", ha apuntado el autor principal, el geólogo coreano Yuong-Nam Lee, del Instituto de Corea de Geociencia y Recursos Minerales (KIGAM).

Fue descubierto por primera vez en julio de 1965 en Mongolia. El fósil consistía solo en algunas costillas y vértebras y un enorme conjunto de garras. Lo poco que se tenía suponía una extraña mezcla de rasgos que desafiaban su categorización.

El enorme tamaño de este reptil generó múltiples especulaciones durante décadas tras el hallazgo de los primeros fósiles, ya que se podía tratar del "mayor terópodo jamás encontrado".

Algunos compararon sus fósiles con los de un Allosaurus (que se parece a un pequeño Tyrannosaurus rex) con garras largas, mientras que otros dijeron que el animal podría haber utilizado sus miembros delanteros gigantes para colgarse de enormes árboles como un perezoso gigante.

En 2009, un equipo coreano-mongol volvió a la cantera mongola y consiguió reconstruir casi la totalidad del esqueleto. Estos hallazgos revelaron que se podía tratar de un dinosaurio con una dieta vegetariana o mixta, más que de un depredador. Sin embargo, faltaba por encontrar el cráneo para responder a muchas de esas dudas.

El paleontólogo estadounidense Thomas Holtz, de la Universidad de Maryland, explica que afortunadamente el cráneo y los pies de uno de estos terópodos se encontraban en una colección privada y el paleontólogo belga Pascal Godefroit convenció a los propietarios para ponerlos a disposición de los investigadores, informa Efe.

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